Archive for agosto, 2013

Alfabeto Ogham: El significado de nuestras alianzas

El otro día una amiga de Dublín nos contó que había encontrado información sobre la inscripción y el lenguaje que tenemos escrito en nuestras alianzas. En mi alianza pone Victoria y en el de Vicki pone Miguel Angel. Lo único que sabíamos es que era un lenguaje primitivo celta, pues aquí tenemos un poco más de su historia….

anillos-de-boda-Alfabeto-Ogham

El alfabeto Ogham. Tuvo su origen en Irlanda, probablemente como resultado del contacto con Británicos Romanizados en Gales versados en la escritura y la lectura, quizás un siglo o dos antes de que las primeras piedras Ogham fueran talladas. Esto sitúa el origen del alfabeto Ogham alrededor del siglo II de nuestra era.

Estructura
El sistema Ogham consiste de veinte letras, a las que otras cinco fueron añadidas en una época posterior de su desarrollo. Las veinte letras originales consisten en entre una y cinco líneas rectas o muescas que se cruzan con una central línea vertical.

Las inscripciones solían hacerse desde la base de la piedra hacia arriba, pasando a veces por encima de la parte superior y continuando hacia abajo por el otro lado.

Historia
Alfabeto_OghamLa naturaleza del sistema Ogham, con sus grupos de una a cinco líneas o muescas, sugiere que podría haber originado como un sistema de cuentas empleando varitas de madera. Tal sistema de contar en unidades de cinco resulta natural como consecuencia de contar con los dedos.

Dado que tales varitas serían hechas de madera, tendrían pocas posibilidades de sobrevivir hasta la actualidad.

El alfabeto Ogham, poco práctico para inscripciones de más de unas cuantas líneas, cabe perfectamente con esta actitud. También puede indicar un origen numérico para este sistema el hecho de que el segundo grupo de cinco letras Ogham representa las iniciales de los números uno a cinco.

Se asumió durante muchos años que las piedras Ogham fueron monumentos funerarios o simplemente señalaron las tumbas de los individuos nombrados en ellas.

Quizás sean monumentos a guerreros caídos en lejanas batallas, alzadas por sus familias en casa. O podrían haber sido marcadores de los límites territoriales de los clanes o tribus, en tal caso los nombres habrían sido probablemente los del jefe actual, vivo en el momento de tallarlas.

Pude que algunas de las más antiguas fuesen alzadas para albergar los espíritus de héroes importantes o antepasados del clan.

Ogham como lenguaje y literatura
La literatura de los Bardos irlandeses nos demuestra mediante varias referencias que se tallaba el alfabeto Ogham en pequeñas varitas de madera, y también a este respecto recordamos que las letras Ogham recibieron los nombres de los árboles en una etapa inicial de su historia.

En los manuscritos de la Irlanda medieval el alfabeto Ogham se llamaba el Beth-Luis-Nion por los nombres Gaélicos de las primeras tres letras, que también son los nombres de árboles. Beth es el abedul, Luis el serbal, y Nion el fresno.Las pruebas del uso de Ogham en la magia y en la adivinación son aportadas por los textos de los Bardos irlandeses. Se suponía que el dios irlandés Ogma Grianaineach, («Joven Cara de Sol») inventó el sistema como «prueba de su ingenuidad, y que esta habla debería pertenecer solamente a los sabios, a la exclusión de los rústicos, los pastores y granjeros.»

Ogma es una encarnación del joven Dios Solar Céltico. Se nota que aquí se refiere al Ogham no como alfabeto, sino como un lenguaje para los sabios. Se sabe que el Ogham como lenguaje hablado fue conocido por los Bardos irlandeses del siglo XII, y parece que estaba relacionado con un tipo de habla llamada Shelta, todavía usado por los Gitanos irlandeses en la última década del siglo XIX.

Ninguno de los dos parece haber sido un lenguaje verdadero, pero parecen haber consistido en palabras irlandesas de uso cotidiano, disfrazadas de varias maneras, por la adición de letras o sílabas, el cambio de letras iniciales, o la inversión de palabras enteras.

La literatura insular de la Irlanda medieval nos aporta claras pruebas del uso mágico y adivinatorio del alfabeto Ogham. Puede que tales usos esotéricos fuesen influenciados por contactos con los vikingos que llegaron en número cada vez mayor a Irlanda para saquear o para quedarse a partir del siglo VIII.

Si el uso esotérico de los Ogham aumento o fue inspirado por tales contactos, podría explicarse porque el alfabeto Ogham no se usó más en los monumentos a partir del siglo VIII aunque su uso continuó en las escuelas bárdicas de Irlanda hasta comienzos del periodo moderno.

Inscripciones existentes
Las primeras inscripciones en Ogham que han sobrevivido hasta nuestros días están talladas en piedras alzadas, con el borde de la piedra formando la línea central o tallo. Son muchos los menhires o piedras alzadas que llevan inscripciones en Ogham y que todavía sobreviven en partes de Gran Bretaña e Irlanda.

La mayoría de las inscripciones Ogham que han sobrevivido se encuentran en Irlanda, y consisten de nombres propios escritos en una forma arcaica de la lengua Irlandesa. La agrupación más grande de piedras Ogham se encuentra en el condado de Kerry. También se pueden encontrar piedras con inscripciones en Ogham irlandés en Gales, principalmente en el sur oeste, y hay contados ejemplos esparcidos por las regiones occidentales de Inglaterra y Escocia.

Fuentes: Ecured y la Wikipedia.

Viaje a Japon: Kyoto y Nara.

Tras el primer post de introduccion, volvemos a retomar la historia de nuestro viaje por Japón.  Tal como os comentamos, el domingo 21 salimos desde Amsterdam con destino a Osaka. El avión que tomamos fue un boing 777 de la compañía KLM. El vuelo fue una gozada, aunque Vicki no puedo dormir prácticamente nada ya que teníamos una pantalla con un pequeño media center, para seleccionar películas, series, conciertos o incluso echar unas partiditas a juegos y entre eso y que cada dos por tres pasaban a dar algo de comida o chorraditas, pues hizo que ella no durmiera apenas. Yo por suerte algo pude dormir. Una de las mejores ideas que tuvimos fue que hicimos el equipaje imprescindible y no tuvimos ni que facturar. Con dos mochilas y dos maletas de mano nos fue suficiente, todo un alivio tanto para moverse en Japón como para no tener que rezar porque no nos perdieran la maleta! varios2 22 de Julio – Llegada a Osaka. Objetivo llegar a Kyoto: Templo dorado y Ryoanji. El caso es que tras nuestras 11 horas de vuelo pertinente, llegamos bien temprano al aeropuerto de Kansai en Osaka. Una de sus peculiaridades es que esta construido en una isla artificial en medio del mar y aunque a uno le resulte extraño, es uno de los aeropuertos mas seguros del planeta, adaptado a todo tipo de ataques climatológicos como terremotos, tsunamis y esas cosas tan típicas de allí. En fin, que me voy por las ramas y no me centro. Decidimos que lo mejor que podíamos hacer es ir directamente desde Osaka a Kyoto, llegar al Ryokan y empezar nuestra ruta turística desde allí y así dejarnos Osaka para el final. Tuvimos que coger un tren convencional para no validar la Japan Rail Pass hasta los viajes mas largos y costosos. La Japan Rail Pass es un billete de tren ilimitado dentro de la compañía Japan Rail (JR), se puede comprar por fechas estimadas, nosotros nos pillamos el básico de 7 días. Aviso! La Japan Rail Pass sólo se puede comprar en el extranjero. Desde Japón no se vende. Algo que ya se noto una vez que llegamos fue el bochorno, humedad y calor que había. Esto hizo una maravilla el paseo desde la estación de Kyoto al Ryokan, de apenas unos 15m., donde no paramos de sudar. Una sensación super agradable!! jejeje… Por suerte no dimos demasiadas vueltas e incluso una vecina de la zona nos acercó directamente al Ryokan. Desde el primer momento nos empezamos a dar cuenta que Kyoto tenía un rollo especial, tenía su encanto, no era tan tradicional como nos pensábamos, me explico… el tradicionalismo, los grandes parques y templos están amurallados y la ciudad en sí recuerda a las casitas y barrios de Shin Chan o Doraemon. Aún así nos encantó. Los primeros templosque vistiamos fueron Kinkakuji ó Templo dorado y Ryoanji. El templo Dorado nos parecio espectacular, sacado de una pelicula y con unos jardines perfectamente cuidados y detallados. Por lo que luego pudimos saber, todo lo tienen tan estudiado que hasta la inclinacion de los arboles estaba a medida para resaltar el reflejo con el lago. Kinkakuji ó Templo dorado En cuanto al templo Ryoanji, destaca por su jardín seco o Karesansui, que consiste en arena, grava y piedras, al estilo jardin zen de arena y rastrillo para eliminar el estres, pero a lo grande. Simplemente con sentarse delante y contemplarlo, ya se respiraba tranquilidad. Templo Ryoanji Kyoto Japon El primer día con el cansancio físico y mental que teníamos decidimos recogernos pronto. De vuelta al Ryokan hicimos parada en un mercado donde tuvimos la primera experiencia de probar cosas que a simple vista parece una cosa y luego es otra totalmente diferente. Como por ejemplo el refresco de té verde! Dicho así podéis pensar que estaba bueno, pues no! Sabia mal, no… lo siguiente!! Con esto nos dieron las 8 de la tarde y decidimos dormir… descansar y coger con fuerza el día siguiente. Craso error por mi parte, ya que a las 12 de la noche nos desvelamos, haciendo que yo sufriera y padeciera ese querido Jet lag. No volví a pegar una cabezada en toda la noche!! Una experiencia encantadora y que hizo que al día siguiente volviera a estar reventado. De todos modos, los cafés de latas que había cada dos pasos y las ganas de seguir conociendo nuevas cosas, hicieron que pudiera luchar ante las adversidades. varios 23 de Julio – Kyoto: Kiyomizu Dera, Ginkaku-ji, SanjÅ«sangen-dō, Fushimi Inari-taisha y Tower Hotel En el mismo Ryokan tuvimos la oportunidad de tomar un desayuno típico japonés (arroz, salmón, tofu, sopa miso…), para coger fuerzas y empezar con ganas nuestro segundo día de ruta. Vimos los templos de Kiyomizu Dera (recomendado por Alex y visita obligada si estás en Kyoto porque es precioso!), Ginkaku-ji o Templo Plateado, SanjÅ«sangen-dō y Fushimi Inari-taisha. Fushimi Inari es un templo a las afueras de Kyoto que es donde se pueden encontrar los famosos túneles rojos, esto os puede recordar a la pelicula: «Memorias de una Geisha«. El entorno de este templo era precioso pero si se quiere recorrer todos los túneles rojos hay que ir armado de valor porque son un total de 4 km de túneles que suben hasta la montaña… Nosotros no pudimos hacerlo. El escaso tiempo que teníamos y el calor agobiante que hacía hizo que nos rindiéramos. Voy a volver otra vez a Kiyomizu Dera porque en realidad fue uno de los templos que más nos impresionó de Kyoto. No solo el templo nos gustó, sino también los alrededores. Podemos decir que por aquella zona te adentrabas a un Kyoto más tradicional y profundo. Con calles estrechas, casas antiguas, tiendas de productos artesanales… Realmente espectacular!

Kiyomizu-Dera

Un detalle de aquel día fue que comimos en un restaurante del centro comercial de la estación de trenes de Kyoto. Íbamos muy ilusionados porque íbamos a comer nuestro primer sushi y Japón y vaya chasco!! Nos defraudó bastante y no sabría decir por qué… En realidad el sabor del sushi no era el que nos esperábamos… Nos llevamos un mal sabor de boca. Más adelante contaremos cómo nos lo quitamos 😉 Este dia aprovechamos y subimos a la Tower Hotel, la torre mas alta de Kyoto, sus vistas fueron espectaculares, ademas empezamos a meternos en  la locura de los centros comerciales japoneses, donde puedes encontrar plantas y plantas de tecnología y gadgets, pero esto ya lo comentaré en otro post aparte.

templo-desconocido

Ya de noche, decidimos dar un paseo por Gion, uno de los barrios más tradicionales de la ciudad y el distrito de las geishas. Lamentablemente, no vimos ninguna… pero pudimos disfrutar de Kyoto de noche y nos encantó, vimos otro templo cuyo nombre desconocemos, pero tuvimos el placer de darle un paseo nocturno… precioso con sus farolillos iluminados. Además cenamos en un sitio muy pintoresco en el que tenían una carta enorme para solo UN PLATO. Si, como lo leéis… Solo servían un plato. Era como un crepe con varios ingredientes dentro. Cuando nos lo trajeron, lo primero que pensamos fue «A la mierda los palillos!», así que sacamos el kit de emergencia (tenedor y cuchillos) y nos pusimos las botas! Todavía lo recuerdo y se me hace la boca agua! cena-kyoto 24 de Julio – Kyoto y Nara: Castillo Nijo, el Palacio Heian y barrio Gion Este día pensamos que la mejor manera era dividirlo en varias partes, por la mañana visitariamos el Castillo Nijo y el Palacio Heian, por la tarde Nara y por la noche dios dira… El  Castillo Nijo fue donde se rodó algunas de las escenas de la pelicula Lost in Translation. El Castillo Nijo nos sorprendió. No teníamos grandes esperanzas de que nos gustara y la visita mereció la pena. Dentro del castillo se pueden ver varias estatuas de deidades niponas y un ejercito de imágenes doradas tipo los guerreros de Terracota chinos. En realidad no tienen nada que ver, pero a nosotros nos recordaban a ellos 😉 Sobre las 12 de la mañana decidimos poner rumbo a Nara. Nara es un pueblo cercano a Kyoto. Tiene un parque inmenso con varios templos y ciervos en libertad. Los ciervos son una de sus atracciones turísticas. Están acostumbrados a la gente y cuando nos veía se venían detrás pidiendo comida. Por todos lados en el parque había puestos donde podías comprar galletitas para los ciervos. Se volvían locos con ellas!!! Increíblemente a los vendedores no les hacían nada, pero en cuanto le daban un paquete de galletas a los turistas, los ciervos iban a por ellos!

Dentro del parque vimos dos templos: el Templo Kofuku-ji y el Templo Todai-ji. De este último lo que más nos impresionó fue el Buda que había en su interior. Uno de los Budas más grandes del mundo. Y tenemos que reconocer que impresionaba! También hay que tener en cuenta que era el primer Buda que veíamos en directo. Fue espectacular!!

Templo-Todai-ji

Dentro de este templo había una columna de madera que en su base tenía un agujero que la atravesaba. Según una vieja leyenda, quien atraviese con su cuerpo la columna a través del agujero alcanzaba la iluminación… No preguntéis qué luz, quizas las estrellas, solo sé que me llevé una herida en el brazo al atravesarla, porque sí, la atravesé, hasta me gane el aplauso de los japoneses, jejeje.

tronco-iluminacion

Aquel día comimos en un restaurante en Nara que nos encantó. Nos pedimos unos noodles y una okonomiyaki. Okonomiyaki es un tipo de tortilla, por poner un ejemplo, a la que le echan todo tipo de ingredientes. Todo estuvo riquísimo!!

Para rematar el día, optamos por hacer la ceremonia del Té en el mismo Ryokan, donde ademas nos vestimos con unos kimonos para hacerlo aun más oficioso. Nos explicaron que era una tradición milenaria exportada desde China, requiriendo años de práctica para dominarla. Esta ceremonia sigue unos rigurosos pasos tanto para servir el té como para tomarlo, demostrando compañerismo entre los invitados. Podemos decir que nos recordó a la costumbre de tomar mate en Argentina. kimonos Con esto, dimos por terminado nuestra estancia por Kyoto. Fueron escasamente 3 dias, pero que como podéis ver nos cundió al máximo, creo que con solo 3 días se puede ver lo mas importante. Lógicamente si se tienen más, se podría ver con mas calma, pero para nosotros fue suficiente. Haré una reseña sobre el modo de transporte por Kyoto. El autobús es el más efectivo, cumpliendo a rajatabla sus horarios y con unos mapas muy claros por el cual nos movimos como peces por agua. Sólo hubo un momento que nos perdimos. No como en Tokyo donde era raro no perderse, pero eso ya es otra historia, que ya os contaremos mas adelante…..

Aqui os dejamos una galleria de fotos de la primera parte de nuestro viaje

Viaje a Japon: Introduccion y hoteles…

Ya estamos de vuelta de nuestra gran aventura por el país del sol naciente… Japón!!! Ha sido una experiencia increíble, hemos salido encantados y como en muchas ocasiones nos han comentado, Japón engancha, por su cultura, por sus rarezas y sus curiosidades, aun así… quédense tranquilos, no se me pasaría por la cabeza vivir en un país como este!! Demasiado ajetreo!!

Creo que para hablar de este viaje, se me puede ir un poco de las manos, porque tenemos mucho para contar, ya que hemos intentado vivir todas las experiencias posibles en el poco tiempo que hemos tenido, apenas unos 8 dias para ser mas exactos.

Detallaré un poco como se realizo el primer planning del viaje, para que os hagáis una idea del organigrama que nos montamos. Nuestro viaje empezaba el día 20 de Julio desde Dublin, haciendo una escala de un día en Amsterdam, por lo que el día 21 retomábamos el vuelo hasta Osaka, llegando allí el día 22 y no volver a pensar en un avión hasta el día 30, siendo nuestra fecha de vuelta. Es decir, teníamos que hacer un buen encaje de bolillos, para intentar perdernos lo menos posible. Quedando todo, de una manera tal que así:

Viaje desde Dublin a Japon por Amsterdam

Planning de Viaje
20 de Julio – Dublin a Amsterdam. Noche en Amsterdam.
21 de Julio – Dia/Noche de vuelo. Amsterdam – Osaka
22 de Julio – Llegada a Osaka. Objetivo llegar a Kyoto
23 de Julio – Kyoto
24 de Julio – Kyoto, visita a Nara
25 de Julio – Desplazamiento a Tokyo y visita
26 de Julio – Tokyo
27 de Julio – Tokyo
28 de Julio – Tokyo
29 de Julio – Despedida de Tokyo y nos vamos a Osaka
30 de Julio – Viaje de retorno a Dublin

Como podéis ver, el tiempo en Japón se podría decir que fue cortito, 3 días en Kyoto (gastando parte de un día visitando Nara), 4 días en Tokyo y 1 día en Osaka. Aun así, hemos salido muy contentos del viaje, lo hemos exprimido al máximo, siendo nuestros pies buenos testigos de ellos!! Fijo que si nos quedamos mas tiempo, pues se podría haber visitado todo más tranquilo o bien podríamos haber profundizado un poco más en ciertos parajes como Hiroshima, alguna noche perdida en una estancia/templo/castillo japonés o algo ya mas sibarita, como haberse quedado durante unos días en alguna de sus islas, tumbado a la bartola, disfrutando de sus maravillosas playas. Aun así, ya os digo, que no nos quejamos!!!

A rasgos generales y como post introductorio de este viaje, hemos podido cumplir varios de nuestros objetivos:

– Dormir en un Ryokan. Web: Nagomi-kyoto

Nagomi Ryokan kyoto
Esto fue en nuestra estancia en Kyoto. Los ryokanes son hoteles al estilo tradicional japonés, suelo de tatami, futon (colchoncito) para dormir en el suelo y paredes prácticamente de papel. En los ryokanes se respira tradición, antigüedad y calidez. Nos encantó dicha experiencia y dormimos como reyes. Ademas el personal del hotel fue en todo muy amable y detallista y sobre todo hablaban perfectamente Inglés, que aunque parezca mentira, es algo muy extraño por esas tierras. El nivel de inglés es mucho peor que en España!! Ya os contaremos, pero fue aquí en donde pudimos hacer la ceremonia del té.

– Dormir en un Hotel Cápsula. Web: B&S Eco-Cube Shinsaibashi

Eco-Cube Shinsaibashi
Bueno dormir, dormir… no mucho, ya que fue nuestra última noche en Japón, y estábamos más preocupados en no quedarnos dormidos y no perder el vuelo que en otra cosa, pero aun así, la experiencia fue genial. Un hotel cápsula como podeís ver por las fotos es como si fuera dormir en el nicho de un cementerio, tu «cubículo» es de un tamaño justo donde te da para acosarte (mis pies tocaban la persianita de papel y no es que sea muy alto) y estar sentado, aun así super completo: radio, televisión, despertador, aire acondicionado, wifi, y como no, ultra limpio, siguiendo las lineas generales de Japón. Otra anécdota que tienen estos hoteles es que por norma general son solo para hombres. Por lo que tuvimos que buscar un hotel cápsula donde pudiéramos alojarnos ambos. En el hotel que elegimos había una planta sólo para mujeres donde accedían mediante una tarjeta para entrar en su zona y luego el resto de las plantas, solo para hombres. Yo tuve que lidiar con los ronquidos de mis compañeros de planta, aun así… espectacular y totalmente recomendable.

– Probar un Onsen. Web: Utsukushii Onsen

onsen tokyo Utsukushii

Un Onsen no es más que unos baños públicos para poder ducharse, antiguamente las casas de Japón eran tan pequeñas (siguen siéndolo) que el baño lo omitían, y entonces se estiló tener baños públicos donde la gente se lavaba. Los osen son peculiares por el tema que no aceptan personas con tatuajes, y en nuestro primer intento, al confesar que Vicki tiene una media luna en la cadera, nos dijeron que muchas gracias por nuestra honestidad pero que no podíamos entrar, que estaba prohibido, que es un símbolo de los Yakuza (la mafia japonesa) y que esto provocaba el temor entre los niños. Por lo que en el segundo onsen que probamos, nos quedamos calladitos y se uso una gran tirita para tapar el tatuaje y listo, sin problema. Los onsen vuelven a estar divididos en zona de hombres y mujeres y el acceso a ellos, es totalmente en pelotas! En el osen que fuimos al ser de barrio, y ser un día entre semana, no nos encontramos con ningún occidental. En el onsen se respiraba tranquilidad y la verdad que fue una experiencia más que agradable y al dejarlo para nuestro último día en Tokyo, nos sirvió para disfrutar de un buen momento de relajación y de paz interior. Muchos tendreis la duda que si la fama de  «picha corta» es verdad… pues que quieres que os diga… pero si que es cierto xDD

– Love Hotel. Web: HOTEL Beat WAVE

HOTEL Beat WAVE, love hotel Japon
O lo que en su traducción viene a decir, los hoteles del amor. Suena a chiste, pero estos son unos hoteles para parejitas, amantes o rolletes de una noche. Supongo que aqui nos volvemos a topar con la excusa de que como las casas son pequeñas para tener algo de initimidad, pues se inventaron esto. Este hotel lo probamos en Tokyo tras darnos unos de nuestros largos pateos. Además, ese día empezó a caer un chaparrón que ayudó bastante para motivarnos aún más para entrar. Dichos hoteles tienen un acceso a su hall donde en una pantalla puedes comprobar como son el interior de las habitaciones, tu la seleccionas y luego la alquilas por las horas que quieras. Eso si, estos hoteles no le falta ningún tipo de detalle: Pantalla gigante, Karaoke, PlayStation, cama king size, baño gigante con jacuzzi y un sin fin de servicios a la carta para que se te haga mas amena la estancia. Otra cosa peculiar, que la puerta no se te abre, hasta que no pasa el tiempo contratado o que se yo, la verdad que no nos aclaramos y tuvimos que llamar a la recepción jejejeje

A grandes rasgos estos fueron de las cosas que nos dijimos que teníamos que probar. Aunque ya iremos detallando en más posts, lo que fuimos haciendo cada día y que es lo que fuimos viendo. Porque sino se puede hacer demasiado larga y aburrida la entrada para nuestros lectores!!

Solo terminar diciendo que nos hemos ido de Japon, dejándonos tres cosas pendientes:
Ver el Monte Fuji. Algo que ya nos habían avisado que era muy probable, debido a la humedad que existe, siempre hay un bochorno y una calima, que a veces cuesta ver a tres calles. Por lo que el monte Fuji fue imposible.

Ver a una Geisha o una Maiko. En el barrio de Gion en Kyoto es muy típico verlas, pero no tuvimos esa fortuna. Achacamos que con el calor que se estaba soportando, quien se iba a poner la cara de blanco y a aguantar toda esa parafernalia jejeje

Sentir un terremoto. Tanto decir que es una zona donde hay terremotos a diarios, y nosotros no sentimos ninguno!! Que no decimos que no los hubiera, pero para nosotros pasó desapercibido totalmente.

Bueno para rematar la historia os comentaremos, que en estas fechas el calor es bastante alto, pero soportable, no es que llegemos a temperaturas de unos 40grados como en Córdoba, pero el problema es la humedad que os hemos comentado, era salir desde temprano y ya estar chorreando, por suerte en Tokyo se mejoro. Aun así, no nos libramos de que nos callera algun que otro chaparron.

Respecto a los precios de los hoteles, pues personalmente me han parecido mas baratos de lo que me pensaba, la noche en Amsterdam nos costo tanto o mas que las 4 noches en Tokyo, para que os hagais una idea. Y eso si, todos los hoteles y en todos los sitios, la limpieza era extrema!

Bueno, no os aburrimos mas y ya seguiremos en otro momento!!! Que hay mucho que contar!!! 😛