Te han engañado en todo
Te prometieron que si estudiabas una carrera tendrÃas un buen trabajo, y ahora encadenas contratos temporales de mil euros.
Te aseguraron que comprar una vivienda era la opción sensata, y ahora tienes una deuda para los próximos 30 años más cara que tu casa.
Te dijeron que si trabajabas para una gran empresa, y eras fiel y cumplidor, harÃas carrera, y esa empresa te ha dejado en paro.
Ahora que sabes que todo lo que te dijeron que tenÃas que hacer para tener una vida próspera y tranquila era mentira, ¿qué vas a hacer?
Puedes lamentarte de tu mala suerte.
Puedes culpar a los empresarios, al gobierno, a los especuladores, al capitalismo, a los sindicatos, al sistema…
Puedes insistir en hacer lo mismo, pero con más ahÃnco: estudiar un master además de la carrera, buscar un trabajo en una empresa más grande, jugar mejor al juego de las propiedades inmobiliarias.
O puedes tomar las riendas de tu vida y decidir que si las reglas antiguas no valen para los otros tampoco valen para ti.
No suplicar que te den un trabajo, sino crear tus propias fuentes de ingresos.
No estudiar una carrera, sino aprender y practicar tu pasión hasta conseguir que otros paguen por lo que realmente vales, sin obligarte a competir con miles de licenciados indistinguibles entre sÃ.
Aprender a manejar tu dinero, sin fiarte a ojos ciegos de los consejos de personas que han vivido en otro siglo en el que las reglas y las oportunidades eran otras.
Nadie te avisó de que las reglas habÃan cambiado, pero ahora ya lo sabes.
Ahora solo tú eres responsable de tu futuro.
Fuente: Desencadenado